La energía de pitta, el segundo humor del cuerpo (dosha), dirige en gran parte el intestino delgado. Pitta, que en sánscrito significa "bilis", es un humor que controla el agni y, por consiguiente, la digestión y el metabolismo, y se encarga de que los alimentos se digieran, absorban y transformen adecuadamente en los componentes básicos necesarios para el crecimiento de nuevas células y tejidos. Si el dosha pitta se altera en su propia sede principal, donde la vesícula y el páncreas se unen con el duodeno, todo el proceso metabólico del organismo se ve alterado. Por tanto, la similación y el metabolismo de los nutrientes deviene insuficiente y el cuerpo sufre malnutrición, aunque la persona coma bien. El sobrepeso indica que el organismo ha llegado a esa fase de disfunción intestinal.
Si el vata sigue actuando en sentido inverso, las toxinas intestinales y los fragmentos de residuos, junto con la bilis que libera la vesícula y las enzimas procedentes del páncreas, avanzan hacia el estómago. La disminución de capacidad operativa de la bilis y de las enzimas digestivas puede conducir a la obesidad, que es una afección que provoca la muerte celular por inanición y también a enfermedades cardíacas y al cáncer.
Extracto libro "Los secretos eterbos de la salud" (Andreas Moritz)
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